La Unión de la Reserva de la Fuerza Pública, factor clave para la supervivencia del País

Muchos analistas han dedicado su esfuerzo en estos tiempos de pandemia para observar y analizar fenómenos de la geopolítica que ahora tratan de desestabilizar los países y que algunos sectores denominan la geopolítica profunda que se ocupan del estado profundo (Deep state), por que de acuerdo con los análisis se están dando nuevos movimientos como el nacionalismo (globalismo) y el patriotismo enfrentados, por que el globalismo tiene una agenda que buscan la desestabilización, acabar las economías de muchos Estados y socavar la soberanía, imponiendo las decisiones a su conveniencia, que van dirigidas a invadir las libertades de las personas. Los movimientos de izquierda y algunos líderes de derecha apoyan el globalismo que busca llegar al punto de que los Estados y las personas pierdan su soberanía y materializar el “sueño” de Karl Marx y Lenin de constituir una sola clase social dirigida por unos pocos (elite).

Pues bien, en nuestro medio colombiano han venido creciendo las acciones de los movimientos de izquierda con alianzas de otros sectores persiguiendo la pretensión de llegar a gobernar a Colombia. Hipotéticamente, es probable que las consecuencias de los grandes estragos que está generando la pandemia del coronavirus pueda ser utilizada por estos movimientos, explotando políticamente una probable crisis económica que podría generar grandes movimientos de protesta contra el gobierno, donde se promovería un nuevo gobierno que proclama la igualdad y la reducción de la pobreza, pero acosta de nuevos procedimientos que implicarían el cambio o la modificación de la Constitución Nacional, que les daría el poder para afectar diferentes sectores de la sociedad considerados por ellos como privilegiados y oligarcas. De lado, se aprovecharía el momento para afectar a sus “enemigos” que por más de cincuenta años los han enfrentado y combatido y les impidieron llegar a tomarse el poder por las armas y allí es donde sale a relucir la Reserva Activa de la Fuerza Pública. Pero en general el daño que se puede sufrir no es solo para el sector de la reserva sino es toda la sociedad colombiana la que está en peligro, como ha sucedido en el país vecino de Venezuela.

Por eso, este momento histórico es clave para que la Reserva Activa de la Fuerza Pública se una, por encima de distinciones de fuerza y de grados o niveles, por encima de los egos de poder que se tuvieron en la vida de actividad y que ahora son valiosos por el orgullo de todo lo que representan, pero que en este nuevo escenario no deben prevalecer como imperativo para lograr la organización, la unión y la interacción de la Reserva.

Hoy se impone reconocer y respaldar los diferentes liderazgos que ya existen de personas que ostentaron diferentes grados pero que hoy los mueven propósitos de continuar sirviendo a la sociedad y en particular a las Instituciones de la Reserva Activa. No obstante, la unión de la Reserva debe propiciar el surgimiento de nuevos liderazgos, que los hay en todas las fuerzas, que con el apoyo decidido y participativo de todos como una sola familia se conviertan en un potencial político que permita llegar a los escenarios del Congreso de la República y a los diferentes niveles de gobierno para seguir luchando por los derechos de los ciudadanos y de los hombres y mujeres de a Reserva Activa.

Por ello, el llamado es para todos los hombres y mujeres que una vez vistieron con mucho orgullo el uniforme institucional y que hoy ostentan el uniforme de ciudadanos, para que en unión de sus familias y de los círculos cercanos de vecinos y amigos, y acompañados por la sociedad civil se movilicen por esta causa que contribuya a salvar al país de las pretensiones que tienen las ideologías de izquierda que buscan afectar los beneficios que justamente se adquirieron, por los cuales muchos de nuestros compañeros entregaron su vida como héroes para preservar la vida de los conciudadanos y la permanencia de nuestro Estado democrático.

Es el momento de actuar, de comunicarnos, de participar, de correr el voz a voz, de cambiar la actitud de pasividad que en otros tiempos nos ha marcado, por que aún podemos recuperar el tiempo perdido y aún está en nuestras manos hacer algo. Es mucho lo que está en juego, la estabilidad de nuestra amada Patria, de nuestras familias y de nuestra sociedad en general.

CR. RP. JORGE ELIAS SALAZAR PEDREROS

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